sábado, 2 de enero de 2016

"LOS SANTOS INOCENTES"

EXPLICACIÓN POR ARTÍCULO EXTEMPORÁNEO

            Les comunicamos que este artículo del 28 de diciembre, no se pudo publicar en la fecha correspondiente por problemas de salud. Reconociendo que es importante hablar de esta fecha y, sobre todo de sus aplicaciones, lo hacemos hoy 2 de enero del 2016.

LOS SANTOS INOCENTES

            Durante la octava de Navidad, la Iglesia conmemora a los niños de Belén y de sus cercanías a quien Herodes mando matar. Con su martirio, estas vidas inocentes dan testimonio de Cristo perseguido ya desde su nacimiento, por un mundo que no quiere recibirlo. Ya comienza Jesucristo a ser motivo de contradicción, pero los perseguidores quedan impotentes; Cristo ha venido a cumplir una obra de salvación y nadie se lo impedirá, sólo cuando llegue la hora de Dios caerá en las manos de sus adversarios, pero será para rescatar al mundo con su propia sangre.
            Sin embargo, a Herodes le sorprendería, le causaría pavor conocer a los Herodes de hoy y a sus nefastos crímenes.
            Herodes, un pagano que por temor a perder su reino ejecuta a niños pequeños, creyendo que así se libraría de un impostor o de alguien que quisiera suplantarlo.
            Herodes, un perverso, pero no como los de hoy que ya conocen a Cristo. La multitud de los Herodes del presente, no son paganos y hasta conocen la doctrina católica; sin embargo, el poder, el placer y el dinero los encamina a herir lo más bello de la infancia: LA INOCENCIA.
Inocencia que en un niño no es ignorancia, no es indiferencia, no es estupidez; sino una cualidad natural innecesaria para que, durante su desarrollo, goce de esa época preciosa de la infancia.
            La Inocencia que todo lo contempla puro, limpio, llano, transparente etc.,
La inocencia cuya risa y alegría dá luz a nuestras vidas y nos hace recobrar la esperanza; la inocencia del niño bautizado que ofrece una dulce y serena mirada, a través de la cual  vemos la paz inalterable de Dios y el amor que llena fortifica y fructifica.
             “Dejad que los niños se acerquen a mí, porque de ellos es el reino de los cielos” (San Mateo) Y, aunque este texto evangélico, tiene muchas aplicaciones, la verdad es que Dios tiene predilección por la inocencia.
            Y, ¿quiénes son aquellos Herodes que destruyen la inocencia de los niños? La familia, La Escuela, La sociedad, La televisión, El internet, Las publicaciones impresas grandes o pequeñas; La pornografía infantil, Pederastas, Violadores… y los abortos.
            La Familia que ha perdido, precisamente, el sentido de familia y la responsabilidad de los hijos, y entre descuido, consentimiento, tiranía, y un mundo de pseudo-hogares y madres solteras los niños pierden su inocencia.
            Las Escuelas, instituciones comerciales, sin valores, llenas de conveniencias y adaptadas a este mundo de hoy libertino y sin principios. Sobre todo, los maestros, que no lo son, que han perdido el sentido de su vocación y de la verdadera educación. “Educar es dar al cuerpo y al alma la belleza de que son susceptibles” (Platón). Los Padres y Los Maestros confunden lo académico, que solo es una parte de la educación, con la educación del hombre que es llevarlo a la madurez total y auténtica.
Ya no hay verdaderos maestros. No se diga de ciertos maestros albañiles, que se dicen maestros y se manifiestan en las calles agrediendo, pintando, golpeando, incendiando y su pretexto es algo vergonzoso: no quieren seguirse preparando. ¡Pobres niños! ¡Pobre mundo!
La Sociedad corrompida, sin Dios, en crasa ignorancia; ya no es estímulo, ni ejemplo para los niños.
La Televisión, cubierta de hipocresía: por un lado regala instrucción y salud y por otro difunde los más asquerosos y sucios programas a cualquiera hora y sin brizna de cultura.
Los Medios de Comunicación, cuyos comunicadores, dentro del sistema televisivo, de la radio y del periodismo pierden la moral y se proclama ateos.
El internet, desde donde se puede saber desde la A y hasta la Z de toda inmoralidad. Internet que trabajan muy bien los pederastas, los violadores con su pornografía infantil, añadiendo allí la falta de vigilancia de padres, maestros y superiores.
Los Gobiernos que, de una u otra forma por defender la errónea libertad y la falsa democracia, exhiben lo que no debería exhibirse; permiten lo que no debería permitirse; aprueban lo que no debería aprobarse; defienden lo que no debería defenderse y van destruyendo la verdadera moral por una amoralidad libertina y degradante.
Olvidamos todos que el sol sale todos los días, pero que no sale de pronto, porque a pesar de ser cotidiano, aparece despacio para acostumbrarnos a la luz poco a poco, hasta que llega en plenitud cuando la vista ya ha sido preparada. Así debe ser la formación en el niño: irle enseñando gradualmente, irlo dejando que descubra, que pregunte… e írselo explicando no solo de acuerdo con su edad, sino con su propia sensibilidad. Todo llega a su tiempo. ¿Porqué se ha destruído la inocencia del niño? Los enemigos lo saben. Hagamos, los que hemos comprendido lo que es la inocencia, algo para que el niño viva en su imaginación y creatividad gozando de esa bella época.
“¿Cuándo Jesucristo vuelva, encontrará inocencia en los niños?”
NO.
En todo este sistema y proceso de destruír la inocencia, también se destruyen las vidas hasta llegar a la muerte. De la misma manera por este camino se llega al suicidio y al crimen.  Sin embargo, he dejado el aborto hasta el final para señalar a las modernas herodías, que, junto con sus Herodes, matan en su propio vientre y sin piedad a los hijos de sus entrañas.  ¡Criminales herodías y todos sus cómplices!
Además, les pregunto a estas criminales mujeres ¿Con qué derecho ciegan la vida de un ser humano, que tiene una vocación por delante y cuya vida ha sido creada por Dios?
Dios no ha terminado la Creación, es un CREADOR perpetuo; diariamente, en todo tiempo y espacio de la tierra, está Creando almas que son las que dan forma y vida al cuerpo inerte. Señalando cada alma Creada para cada cuerpo elegido.
¿Creen la Herodías que tienen el poder de dar la vida? No señoras, ustedes son un medio físico: hombre y mujer unen dos células orgánicas, pero sin una vida volitiva ni racional, es necesario que Dios, en el preciso instante en que se unen las dos células infunda el alma Creada y en ese instante al unirse alma y cuerpo se declara la vida humana.  Y las Herodías al matar el cuerpo expulsan la reciente alma del niño, destruyen la vida creada por Dios ¿Quiénes son ustedes para retar así a Dios y destruír el porvenir de una vida…?
Sor Clotilde
 






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